miércoles, 18 de agosto de 2010

La ceguera


29

Posiblemente la ceguera no sea del todo una maldición. Por lo pronto, el tiempo fluye de una manera más fácil. Una persona que tiene vista siempre tiene que estar haciendo algo, leyendo o viendo alguna cosa. El ciego, en cambio, sabe que pasará la mayor parte de su vida solo y no se impacienta. Yo ahora sólo veo sombras, pero la ceguera no ha sido algo patético para mí, porque ha sido un proceso muy lento. En cambio, si una persona pierde la vista de golpe puede, incluso, pensar en suicidarse. Pero si se ha empezado a perder la vista desde el momento en que se nació... Yo sé, por ejemplo, que mi padre murió ciego, mi abuela paterna murió ciega, mi bisabuelo murió ciego. Yo sabía que éste era mi destino.

En alguna parte Borges afirma darse cuenta de que la figura de un escritor ciego mueve a la compasión. Su personaje de algún modo recuerda a Homero.

Siempre atento al contexto, también jugaba con la idea del escritor como símbolo, que muchas veces eclipsa su obra. Solía poner como ejemplo a Lord Byron (aventurero), Paul Valery (razonador) o Quevedo (literato).

Esta doble naturaleza de Borges, el hombre y el escritor, es el tema de algunos cuentos y poemas, bajo la idea de "El otro". El concepto del doble (Doppelgänger: Poe, Stevenson, etc.) era una de sus obsesiones, concepto también relacionado con el problema de la identidad y el tiempo. ¿Cómo es posible que mi yo de ayer sea el mismo que hoy?

Para Borges la cuestión del tiempo era el problema central de la filosofía. Le gustaba regalar "Un experimento con el Tiempo", de J.W.Dunne. Tal vez de ahí su reflexión acerca de que "el tiempo fluye de una manera más fácil", un tanto amarga, la verdad.

Con la ceguera, empezó a escribir poesía, que le era más fácil de recordar. También iba gente a leerle, una vez muerta su madre. Se quedó totalmente ciego más o menos en la época que le nombraron director de la Biblioteca Nacional.

martes, 27 de julio de 2010

Ser andaluz.



28

Yo hubiera querido ser andaluz. Lo que nunca habría querido es ser catalán: los odian en España y entre los franceses se nota en seguida que son impostores.

Borges haciendo amigos.

De joven vivió un par de temporadas en España, en Madrid, Granada y Mallorca, creo, (tendría que revisarlo). Su padre era profesor de psicología y al quedarse ciego perdió el trabajo, con lo que la familia empezó a viajar, no sé si en busca de médicos o algo así. También estuvieron en Ginebra un tiempo, donde estudió el bachillerato y aprendió alemán. Por cierto, Borges fue un niño enfermizo y nunca fue al colegio, sus primeros años se educó en casa. Personalmente, (y aquí ya me estoy columpiando) pienso que eso pudo influir en su carácter pusilánime respecto al sexo y su idealización de la violencia. Bueno, y en su dependiencia materna y su falta de sentido práctico en general.

Añadir que durante esos años en España participó en las vanguardias literarias, concretamente en el ultraísmo, (del que luego renegaría) y que el español Guillermo de Torre se casó con su hermana, la pintora Norah Borges. En lo literario, Borges no valoraba excesivamente a su cuñao, vanguardista militante. Borges siempre defendió el clasicismo (su libro favorito era la Divina Comedia) y el lenguaje claro y sencillo. Por otra parte, argumentaba que los experimentos formales y narrativos de Kafka o Joseph Conrad eran superiores a los de Joyce o Paul Valéry. Igualmente, era un gran admirador de las omisiones y ambigüedades de los cuentos de Kipling y Henry James, a los que copió bastante.

Ah, con respecto a los andaluces, recordar que no soportaba a Lorca, al que conoció en algún sarao, y al que solía calificar como "andaluz profesional".

martes, 20 de julio de 2010

Off topic. Sincronías.


Hoy más que un borgismo, un borginismo.

Por un lado el "miniensayo" 'El sueño de Coleridge', que habla del hecho de que Samuel Coleridge soñó el poema 'Kubla Kanh', donde se habla de Xanadú, el fabuloso palacio del emperador. Años después Borges averigua que el mismo Kubla Kahn había soñado a su vez con el palacio.

En el blog Ausente podemos leer hoy otra historia eminentemente borgiana y que no me he podido resistir a incluir aquí (mucho saqueo yo a este hombre): "Un niño pierde una novela de a duro en un relato de corte fantástico escrito en 1995 y diez años más tarde alguien busca una novela inencontrable de la que sólo tiene la portada."

viernes, 16 de julio de 2010

El Maní Volador


27

¿Usted vio la última campaña presidencial? ¡Qué vergüenza! Con Carter recorriendo el país con un avión que se llama 'El Maní Volador'. ¿No es una vergüeza? Bueno, pues ha sido votado: es casi peronismo, ya... Es algo demagógico. Un presidente que todas las semanas de dos a cinco, tiene un día en el cual atiende personalmente el teléfono... Es muy sospechoso, ¿no? Cuando fue a Texas, ante los chicanos, los 'Tex-Mex', se presentó con un sombrero mejicano para congraciarse con ellos: Quiere decir que es una persona burda y astuta... Según el color local se disfraza de obrero, de ferroviario, de caballero...

Al margen de la poca simpatía de Borges por la democracia, desde nuestro punto de vista de hoy, no deja de asombrarnos la ingenuidad de Borges frente a los fenómenos de marketing político, que nosotros ya damos por descontado. Al igual que ocurre con el resto de la publicidad, nadie piensa que los políticos digan la verdad.

viernes, 25 de junio de 2010

Las cárceles


26

Las cárceles me parecen abominables. A ciertos hombres, en vez de meterlos en la cárcel hay que matarlos. Ni a mis enemigos les puedo desear las cárceles, pero la muerte sí.

Me llama la atención el uso del plural, "las cárceles" en vez de "la cárcel".

El laberinto es una forma de cárcel. El mundo es una cárcel. La Cábala es el plano del laberinto.

Debajo, algunos ejemplos

La casa de Asterión


Los dos reyes y los dos laberintos.

La escritura del dios.


El milagro secreto.

jueves, 24 de junio de 2010

La Cábala.


25

Las diversas y a veces contradictorias doctrinas que llevan el nombre de La Cábala, proceden de un concepto del todo ajeno a nuestra mente occidental: el concepto de un libro sagrado. El curioso "modus operandi" de los cabalistas, está basado en una premisa lógica: la idea de que la Escritura Sagrada es un texto absoluto, y en un texto absoluto nada puede ser obra del azar. Desde luego no hay textos absolutos: en todo caso los textos humanos no lo son. Pero es un texto redactado por una inteligencia infinita. ¿Por qué suponer alguna grieta? Todo tiene que ser fatal. Y de esa fatalidad, los cabalistas - a fuerza de transponer letras, de leer oblicuamente el texto, de modificar letras y de buscar un sentido simbólico a las palabras - dedujeron ese sistema que se llama la Cábala. Creo que ese sistema no es una pieza de museo de la historia de la filosofía. Ese sistema creo que tiene un aplicación. Ese sistema puede servirnos no sólo como curiosidad de la historia filosófica. Puede servirnos para pensar, quizá para comprender - o la palabra es demasiado ambiciosa - para tratar de comprender el universo.

Al igual que Madonna y Philip K Dick, Borges era fan de la Cábala. Bueno, de la cultura judía en general, y de la Cábala en particular. La idea que hubiera un orden en el mundo aunque sea secreto, le era muy cara, y está relacionada con el símbolo del laberinto. En ese sentido, también le gustaba mencionar la máquina lógica de Ramón Llull.

Hoy sabemos que la mera combinatoria no sirve para comprobar la verdad o falsedad de las proposiciones, ya que los sistemas lógicos, a partir de cierto grado de complejidad, son incompletos. No puede existir un texto aboluto ni siquiera para una inteligencia infinita, porque sus significados no se agotan nunca.

lunes, 21 de junio de 2010

Tal vez soñar.




24

La idea de que uno va a desaparecer totalmente es agradable, reconfortante. Por lo menos, lo es para mí... Sería horrible seguir siendo y, sobre todo, seguir siendo Borges. Estoy harto de él.

"Seguir siendo Borges". La parte budista/schopenhaueriana parece admitir la posibilidad de que desaparezca la personalidad pero permanezca un cierto principio vital, reabsorbido, reencarnado o transformado.

"Estoy harto de él". El valor frente a la muerte.

Borges no menciona aquí otra posibilidad expresamente contemplada en su cuento 'El Inmortal': Un longevo, con el tiempo, olvidaría quién es, con lo que incluso en ausencia de muerte la personalidad desaparece.

martes, 25 de mayo de 2010

Con un pastor



23

En España, y aun aquí, en la Argentina, se puede conversar todavía. A mí me gusta conversar con los "chauffeurs", con los mozos de café... En España yo he estado conversando con un pastor en la sierra de Guadarrama; con un pastor, ¿se imagina? Fui feliz. En Estados Unidos no se puede dialogar ni con un profesor. Yo he estado en una comida y una señora me dijo: "¿Usted es el latinoamericano?", y yo: "No hay latinoamericanos: hay argentinos, colombianos, chilenos; no creo que nadie se sienta latinoamericano: cada uno se siente de su república." "¿Y usted qué enseña?" "Yo enseño literatura argentina". "¿Argentiniana?" "No, señora, argentina; no existe la palabra argentiniana, inventada para que con colombiana y con boliviana." "¡Ah! Qué interesante, sí, de modo que es usted español." "No señora, dejé de ser español en 1810; pero en fin, digamos que sí. Enseño literatura argentina, que es una rama de la literatura castellana..." "Yo soy profesora también." "Y usted qué enseña?" "Yo enseño conversación." Yo pensé que sería conversación en castellano, o en alemán, o en sueco... "No, conversación en inglés. Mis alumnos tienen una media de veinticinco años. Se ha juzgado necesario." Y yo me di cuenta de que tenía razón. La gente dice, por ejemplo "Yeah... Ok...", una serie de sonidos básicos, así; y se acabó. De modo que tienen que enseñarles a conversar.

Borges pasó un tiempo en una universidad de Texas de profesor de literatura, no sé si el encuentro que refiere pertenece a esa época.

La idea del pueblo como guardián de la lengua frente a la decadencia de la vida urbana tiene su origen en el nacionalismo romántico alemán -nacionalismo que impregna toda la conversación-, idea que enlaza a su vez con el buen salvaje de Rousseau

martes, 18 de mayo de 2010

Eres una barroca absurda



22

Lo barroco se impone entre el escrito y el lector. Por otro lado, el barroquismo es como un pecado de vanidad: parece como si el escritor barroco estuviera pidiendo que se lo admire. Se siente el arte barroco como un ejercicio de la vanidad, aun en el caso de los más grandes escritores.

En su juventud, Borges militó en el ultraísmo. Luego renegó de las vanguardias, pero durante mucho tiempo Quevedo fue su escritor de referencia, (junto con Carlyle). Quevedo encarnaba el tópico de "Escritor para escritores". Gracián siempre fue objeto de burla. Decía que a Schopenhauer le gustaba porque lo leía traducido y se quedaba más con los juegos conceptuales que con las cacofonías, y ponía de ejemplo la metáfora de Gracián "Estrellas, gallinas de los campos celestiales"."¿Cómo se pueden comparar las estrellas con unas gallinas y pretender ser buen escritor?", decía.

Al principio de la entrevista de la que os hablaba ayer, habla con cierto retintín de "El cielo barroco de Mujica Láinez". El padre de Borges solía reírse de los versos de Fray Luis (uno de los mejores poetas españoles para Borges) "ni del dorado techo/se admira fabricado/del sabio moro,en jaspes sustentado". "Nada más peligroso que esos techos artesonados que luego se le caen a uno encima", decía el padre.

Borges dijo que el barroquismo es la decadencia de un estilo. Es una idea que está en Spengler, formulada de forma extensa en "La Decadencia de Occidente". Las culturas pasan por una serie de etapas de crecimiento, madurez y decadencia. El paso del capitel dórico al corintio sería un síntoma de decadencia de la cultura griega.


Por otro lado Borges fue una gran admirador de Lugones, poeta cercano al modernismo, que también es, tal vez, una forma de barroquismo.

lunes, 17 de mayo de 2010

Soy escritor


21

El azar, (tal es el nombre que nuestra inevitable ignorancia da al tejido infinito e incalculable de causas y efectos) ha sido muy generoso conmigo. El azar dice que soy un gran escritor. Agradezco esa curiosa opinión, pero no la comparto. El día de mañana algunos lúcidos la refutarán fácilmente y me tildarán de impostor o de chapucero, o de ambas cosas a la vez.

De la doctrina del enterno retorno de Nietszche y de la teoría de la voluntad de Schopenhauer, Borges toma la idea de que un hombre es todos los hombres y que todo nos pasa a todos. Esa sería la base de su supuesta humildad. Sin embargo, por otro lado, Borges siempre declaró que su destino era ser escritor, y tenía un gran concepto de sí mismo como escritor. En cierta ocasión, ya mayor, pidió que le leyeran un cuento suyo, creo que Ulrica, y a su término declaró: "Soy escritor".

"El día de mañana algunos lúcidos..." Esos lúcidos bien podían ser Bioy y Borges, cuyas conversaciones tantas veces giraban en torno a los supuestos méritos literarios de sus colegas.

Borges utiliza una táctica defensiva. Así como Kafka o Virgilio, que pidieron a los amigos quemar sus manuscritos, o Browning, que en el prólogo de un libro de poemas afirmaba que su libro no valía nada, Borges se borra de la lista de grandes escritores para que nadie pueda acusarle de vanidad y librarse en cierta manera de la responsabilidad de haber escrito su obra. Esto lo sé por el propio Borges.

Aquí os dejo una entrevista
donde le dicen que es el mejor escritor del mundo y responde: "Cómo serán los demás".

domingo, 9 de mayo de 2010

Falsos forofos.


20

Recuerdo que una vez conversé con muchachones que estaban ahí, en la Plaza San Martín de Buenos Aires, cantando "Perón, Perón, qué grande sos". Bueno... Yo estaba con una amiga y los dos muchachones se me acercaron, con sus tambores, y nos planteamos: si nos vamos van a pensar que estamos huyendo. Nos quedamos. "¿Es usted el señor Borges?" Y yo siempre he usado: "Y bueno, más o menos", o "a veces", o "nadie sabe"... Entonces me pidieron que les firmara un autógrafo en unas hojas de papel. Les pregunté: "Y dígamne, ¿no son ustedes peronistas?", y me dijeron: "Pero no, señor, ¿qué se ha pensado usted? Nos pagan y tenemos que estar hasta las doce y cuarto tocando el tambor y cantando en la plaza." No recuerdo cuánto les pagaban, era mucho para aquel entonces. Y luego decían eso de "La muchedumbre aclamando al dictador". Era que la GCT buscaba a muchos pobres y les daba unos bombos y les pagaba. Cuando me vine a casa me fijé que seguían cantando exacatamente hasta las doce y cuarto. Y todo era así. Luego los crímenes espantosos que se cometieron: Aramburu que fue secuestrado, que fue torturado, mutilado y luego asesinado.

Aquí volvemos al tema del valor físico, cuestión que obsesionaba a Borges. Relacionado con este tema y con su antiperonismo, solía referir dos anécdotas: su renuncia como director de la Biblioteca Nacional y su enfrentamiento con unos estudiantes que querían interrumpir su clase durante una huelga.

En esta anécdota en concreto, podemos destacar, desde el punto de vista psicológico:

- "Estaba con una amiga". Demostración de valor delante de la chica.
- "Muchachones". Eran grandes.
- "Nos quedamos". Que no parezca que tenemos miedo.
- "Más o menos". Respuesta evasiva disfrazada de broma. Hay miedo.
- "¿No son ustedes peronistas?" Sorpresa por unas prácticas de propaganda bastante comunes. Lo gracioso, y que no contempla Borges, es la posibilidad de que sí que fueran peronistas, y la vez, quisieran un autógrafo de alguien famoso, por el mero hecho de ser famoso.

viernes, 7 de mayo de 2010

Agnóstico, no ateo.



19

No podría definirme como ateo, porque declararme ateo corresponde a una certidumbre que no poseo. A fin de cuentas, el universo es tan extraño que todo es posible, hasta un Dios que es uno y que es tres.

Borges solía decir que el universo tal vez se pareciera a lo descrito por Schopenhauer. Ambos se sentían muy próximos al budismo.

Sobre el origen de la palabra agnóstico, aquí podéis ver una explicación de Gustavo Bueno.

jueves, 6 de mayo de 2010

Chesterton


18

Como dijo un poeta, siempre me asombrará ver surgir en la enorme noche una nube mayor que el mundo y un mostruo hecho de ojos. Hay un poema muy lindo de Chesterton que dice lo siguiente: "Voy a envejecer para todo. Para el amor. Para la mentira. Pero nunca envejeceré para el asombro: siempre me seguirán asombrando las cosas fundamentales."

El poeta citado ('mostruo hecho de ojos') es el mismo Chesterton.

Chesterton estuvo muy influenciado en su juventud por Schopenhauer. Su posterior conversión al cristianimo, sus discusiones con Wells y Shaw, y en general toda su obra, pueden interpretarse como la respuesta de Chesterton al filósofo alemán: la vida es buena.

Aquí podéis ver un vídeo de Chesterton en Youtube.

miércoles, 5 de mayo de 2010

Poética.


17

Yo anhelo un arte que traduzca la emoción desnuda, depurada de los adicionales datos que la preceden. Un arte que rehuya lo dérmico, lo metafísico y los últimos planos egocéntricos y mordaces. Para esto, como para toda poesía, hay dos imprescindibles medios: el ritmo y la metáfora. El elemento acústico y el elemento luminoso... La metáfora, esa curva verbal que traza casi siempre entre dos puntos -espirituales- el camino más breve.

Las poéticas y los manifiestos suelen ser bastones para darles con ellos en la cabeza a los demás, quiero decir que suelen estar escritas más en contra de lo ajeno que a favor de lo propio. Sabemos que Borges militó de joven en alguna vanguardia artística (ultraísmo) y que posteriormente defendió la sencillez en la escritura, despojada de barroquismos, que consideraba la decadencia de un estilo. Sin embargo, bajo su aparente sencillez, el estilo de Borges es muy alambicado, la prueba de ello es que es fácilmente parodiable. Por ejemplo, en este mismo texto utiliza una metáfora para describir lo que es una metáfora 'esa curva verbal' etc.

Para Borges las metáforas válidas son las que perduran en el tiempo: sueño-muerte, destino-ciego, rosa-amor, etc, porque tienen una base real. La labor del poeta sería buscar esas afinidades.

Sobre el ritmo y la metáfora es interesante leer sus estudios de la poesía anglosajona, basada en la aliteración en lugar de la rima, y en las 'kenningars', una especie de listado de metáforas convertidas en tópicos, que sustituyen a las palabras y, a su vez, pueden generar nuevas metáforas.

Respecto al arte que pueda ofrecer 'la emoción desnuda', decir que es un platonismo que no entiendo, no entiendo que pueda existir un arte sin contexto, o sin metafísica, o sin 'elementos dérmicos', signifique lo que signifique eso...

martes, 4 de mayo de 2010

Pro patria mori


16

Creo que el ejercicio de las armas es verdaderamente honroso, más allá del hecho de ejercerlo por unas u otras causas. La misión del soldado es algo noble, y sé que al decir esto me enemisto con mucha gente. No tengo interés en enemistarme ni en congraciarme con nadie, pero hay que pensar que la poesía empieza con la épica. En todas las culturas del mundo se empieza siempre con las armas.

Borges identifica el ejercicio de las armas con la virtud, dulce et decorum, etc. Sin embargo, ya en la propia Ilíada, Aquiles es menos virtuoso que Héctor, siendo el primero más bravo.

De entre la abundante literatura acerca de la guerra justa, recomiendo este panfleto de Chesterton escrito al comienzo de la Primera Guerra Mundial. Chesterton perdió a su hermando luchando contra las Potencias Centrales. "Esta guerra es la más sincera de la historia. Prusia, Inglaterra y Francia prometieron no invadir Bélgica."

La apelación a la poesía épica ofrece un argumento que puede parecer curioso: se justifica la ética a través de la estética. Borges solía citar a Swedenborg, quien afirmaba que la salvación del alma no dependía sólo de la ética, sino también de la inteligencia y de la estética. Es decir, para ir al cielo habría que ser bueno, culto y tener buen gusto.

Sobre la diferencia entre ética y moral.

Borges escribió contra Hitler, pero defendía las dictaduras militares anticomunistas como un mal menor.

viernes, 30 de abril de 2010

Aurea mediocritas


15

Para mí la clase media es una clase superior. La aristocracia es muy parecida al pueblo. Los aristócratas son muy nacionalistas y el pueblo también lo es. Les da por las mismas cosas. Les interesa el lujo, las carreras.

Borges vivió de joven en Suiza, y como todo el mundo sabe, está enterrado allí. Solía recordar que en Suiza había apenas policía, cosa que achacaba a que todo el mundo era de clase media.

Las palabras de su tumba, escritas en anglosajón son 'And Ne Forhtedan Na'. Significan 'No hay que tener miedo'.

Volvemos al tema del valor, pues.

jueves, 29 de abril de 2010

Quién tuviera una casa solariega y blasonada


14.

Soy descendiente de Juan de Garay, fundador de la ciudad de Buenos Aires, y de Cabrera, fundador de la ciudad de Córdoba. Desciendo de conquistadores españoles y luego de soldados argentinos que se batieron contra los españoles, cosa que era natural que sucediese. En fin: una familia de soldados la mía. Mi abuela inglesa pertenece a una familia de pastores protestantes, lo cual también me parece bien, porque quiere decir que llevo La Biblia en la sangre. Mi abuelo, el coronel Francisco Borges, se hizo matar deliberadamente después del Combate de la Verde. Por una serie de circunstancias políticas, él deseaba la muerte, ya que se había rendido el general Mitre, y entonce montó a caballo. Era un tordillo; se puso un poncho blanco y al trote avanzó hacia el enemigo ofreciéndoles un blanco espléndido. Le alcanzaron dos balas de fusiles Remington de los tiradores adversarios y cayó muerto.

Borges subraya su aristocracia de sangre. La referencia a La Biblia hay que interpretarla, tal vez, como una referencia a los hechos de armas del Antiguo Testamento. La muerte del coronel Borges forma la estructura fundamental de muchos de sus cuentos, 'el momento decisivo'. Volvemos a la épica.

Aquí, el poema, 'Alusión a la muerte del Coronel Francisco Borges'.

miércoles, 28 de abril de 2010

Indigno del cielo y el infierno.




13

Como ser humano, soy una especie de antología de contradicciones, de 'gaffes', de errores, pero tengo sentido ético. Eso no quiere decir que yo sea mejor que los otros, sino simplemente que trato de obrar bien, y no espero castigo ni recompensa. Que soy, digamos, insignificante, es decir, indigno de las dos cosas. El cielo y el infierno me quedan muy grandes.

Aquí Borges no hace otra cosa que exponer la moral estoica. "La recompensa de una buena acción es haberla hecho" (Séneca). No debemos esperar premios ni castigos, la virtud es un fin en sí mismo. Le gustaba citar a De Quincey: "La causa de los vencedores fue agradable a los dioses, mas la causa de los vencidos, a Catón". "Es el mayor elogio que se ha hecho jamás a una persona. De un lado están todos los dioses; del otro, Catón".

Aunque Borges era conservador, no era católico. "Los católicos prefieren el Papa a la verdad". En el aspecto moral, no entendía la deproporción entre la falta y el castigo: la brevedad de la vida por un lado y la eternidad en el infierno por otro. "No puedo creer en un Dios que regente un establecimiento penitenciario."

Su libro favorito era 'La Divina Comedia', pero en cuanto a su verosimilitud, prefería el más allá de Swedenborg, donde las almas van al cielo o el infierno en virtud de sus inclinaciones, sin saber realmente dónde están.

Como sabe todo el mundo, la mayoría de los cuentos de Borges tratan acerca del 'momento decisivo' donde un personaje sabe si es un valiente o un cobarde. Para Borges, el valor -el valor físico o moral-, es la virtud suprema.

miércoles, 21 de abril de 2010

Enterrado vivo.


12

A mi bisabuelo paterno le hicieron una operación que apareció en una revista porque en aquel tiempo fue algo notable. No sé cómo la harían porque entonces no existía la anestesia. Tal vez le darían un poco de alcohol. Hay una novela de Melville, el autor de 'Moby Dick', que sirvió mucho como ballenero y en la marina norteamericana. Él cuenta de una operación a bordo de un velero, en alta mar, por el año 1870 o algo así, en que había que amputar la pierna a un marinero. Entonces se reunió toda la tripulación en la cubierta del barco, sacaron al marinero atado a una tabla, lo emborracharon con ron, y luego se dio la orden de empezar a tocar la banda, de modo que el hombre estaba embrutecido por el alcohol, la música, y además llamaron a sus dos mejores amigos, que se le fueron encima y le dijeron malas palabras y le rompieron la cara a puñetazos. El marinero trataba de defenderse pero no podía por estar atado, y aprovecharon esto para amputarle la pierna. Se supone que igual sufrió bastante. A mí me hicieron muchas operaciones. En la última la anestesia no duró y el médico me dijo que me iba a doler, pero que estuviera quieto porque si no, me quedaría irremediablemente ciego. Yo sentía el dolor, aunque no era muy fuerte. Si una tierrita en el ojo molesta, cómo no va a molestar un bisturí con los ruidos del raspaje. Pero me quedé quieto a pesar de sentir en mi corazón como martillazos, y lo único que pensé fue en no moverme. Ni siquiera reparaba en el resultado: si yo giraba la cabeza, la posibilidad de mi visión había concluido. No, no pensé en Dios. Sólo me preocupé de centrar mi atención en la inmovilidad. Mi madre estaba a mi lado y yo no pensaba en ella, ni en mí, ni en nada. Me decía como un grito: yo no debo moverme.

Volvemos al tema de la importancia del valor físico para Borges. Lo de su bisabuelo me deja flipao, debía ser en el siglo XVII (es broma).

Lo de que te corten una pierna y encima te partan la cara es como para pensarse el enrolarse.

La inmovilidad en la anestesia recuerda a los cuentos de Poe sobre catalépticos. A mí me pasa con frecuencia que cuando viajo muy cansado me quedo dormido en mala postura, y quiero despertar y no puedo. ¿A vosotros os pasa? Cuando la cosa se alarga es horroroso.

Hay una variación sobre los cuentos de enterrados vivos que me encanta: un cuento de Stanislav Lem sobre un hombre que sabe que el alma no existe y se propone construir una. Para ello coge el cerebro de su mujer y lo vuelca en un ordenador hecho con materiales indestructibles, aislado de todo estímulo externo, para que dure eternamente. Bueno, ¿eh?

También me gustó mucho un episodio de Alfred Hitchcock donde le van a hacer la autopsia a un accidentado de automóvil que está totalmente paralizado -menos el dedo meñique-, hasta que descubren que está vivo porque se pone a llorar. Un poco cutre así contado pero genial realizado en cámara subjetiva.

jueves, 28 de enero de 2010

Ava Gardner.


11.

No sé por qué dicen que carezco de sentimientos. O que a mi vida le fueron negadas ciertas experiencias fundamentales. Supongo que se refieren al amor. Se equivocan los que piensan que no he conocido el amor. Puedo afirmar que he vivido enamorado. El primer amor (ideal, por cierto), de mi vida fue una actriz, Ava Gardner. Solía ver sus películas dos veces por día. Apenas terminada la función, deseaba que llegara el día siguiente para volver a verla. El amor exige pruebas. Pruebas sobrenaturales.

Podemos pensar que la Beatriz Viterbo del El Aleph es un trasunto de Ava Gardner.

jueves, 21 de enero de 2010

El Tigre.

10.

Cuando yo era chico mis padre me llevaban al zoológico y yo pasaba las horas muertas viendo a los leopardos, a los jaguares, a los tigres. Me quedaba mirándolos como fascinado hasta que llegaba la hora de cerrar. Y actualmente, que estoy casi ciego, el único color que veo es el amarillo. De modo que el amarillo es el primer color que vi realmente (pues es el pelaje del tigre), y será el último que vea. Fíjese, en Nueva York, los "Yellow Car Come" están pintados de amarillo porque es el color que se distingue mejor. Una fábrica de automóviles en Canadá hizo una serie de experimentos que se consideraron después inútiles (pintando coches de diversos colores, para "noches sin luna" o "días de lluvia"), y resultó que cuando el coche rojo no se veía, se distinguía el amarillo. Y aún aquí, en Buenos Aires, los techos de todos los taxímetros son amarillos por la misma razón.

El tigre, el espejo, el laberinto y el cuchillo, bla, bla, bla.

Recordemos el poema de Blake y el ruiseñor de Keats.

Recordemos un poema y un relato.

martes, 12 de enero de 2010

Fútbol y ajedrez: juegos de guerra.



9

El ajedrez nació, quizás, en la legendaria Atlántida, y muchas de sus piezas han ido cambiando de forma con el tiempo. Por ejemplo, el caballo era el caballero, y el alfil, que es una deformación de marfil, era un elefante. Es increíble cómo una cultura que se desarrollaba con juegos como el ajedrez, haya degenerado a juegos tan vulgares como el fútbol.

Sabido es el gusto de Borges por las etimologías y su odio por el fútbol, odio que comparte con Sánchez Ferlosio. No así con Camus, quien dijo que todo lo que sabía de moral lo había aprendido en el fútbol y el teatro.